En 1999 la Asamblea General de la ONU proclamó cada 12 de agosto como la fecha en la que celebrar el Día Internacional de la Juventud. Este día nació con el objetivo de abordar los problemas a los que se enfrentan los jóvenes actuales y el papel fundamental que juegan en nuestra sociedad.
Este año, el Día Internacional de la Juventud hace hincapié en garantizar una educación de calidad inclusiva y equitativa para los jóvenes de todo el planeta.
Según las Naciones Unidas, la juventud abarca el período comprendido entre los 10 y los 24 años de edad. Es una fase de la vida llena de cambios. En ella, cada individuo de la sociedad pasa por la complicada transición entre la niñez y la vida adulta.
Pero si tenemos que destacar una etapa especialmente complicada, esa es, sin duda, la adolescencia. En ese momento de la vida, se mezclan las experiencias adquiridas durante la niñez con las anheladas de la fase adulta. Sin olvidar que comienzan grandes cambios a nivel físico y psicológico.
Los adolescentes pasan por un baile hormonal que les hace sentirse en un carrusel emocional de manera constante. Necesitan demostrar que son mayores, aunque por dentro siguen siendo niños.
Esta necesidad de sentirse adultos les lleva a intentar hacer las cosas a su manera, transgrediendo todas las normas impuestas.
Pero esta rebeldía les puede llevar a cometer errores con consecuencias fatales. El problema reside en que en la mayoría de los casos, los jóvenes no manejan la información necesaria que les permite decidir de manera responsable.
Los adolescentes sienten la necesidad de demostrar que son mayores, que hacen lo que desean y que son como los demás. En definitiva, quieren ser aceptados por la sociedad. Aunque esto implique en muchos casos poner en riesgo su salud.
Durante la juventud es fundamental el papel de la educación. En esta etapa se definirá la personalidad de cada joven, lo que marcará su vida adulta.
Una de las partes más difíciles de afrontar en el ámbito educativo es el tema de la sexualidad. Tradicionalmente ha sido un tema tabú, aunque en las últimas décadas parece haberse avanzado mucho en la forma de transmitir la información.
Precisamente, los avances tecnológicos y el temprano acceso de los jóvenes a Internet, aplicaciones móviles y redes sociales, hace que ellos mismos adquieran los conocimientos que no reciben por otras fuentes.
Lo que podría ser un apoyo adicional para ellos, se convierte a veces en la única manera de aprender sobre la sexualidad. De ahí la importancia de que se aborde la educación sexual desde casa y en los centros educativos.
En la actualidad, la gran mayoría de los centros escolares comienzan a impartir nociones sobre educación sexual desde las primeras etapas educativas. Obviamente, los contenidos son básicos y buscan resolver dudas (sobre todo anatómicas) a los más pequeños.
Conforme van avanzando los cursos, la temática puede abordarse de manera más amplia. Explicar en qué consiste la reproducción humana y los órganos sexuales, es una forma de dar continuidad al tema.
A medida que los jóvenes crecen, llega el momento de abordar la educación sexual. Existen datos que revelan el gran aumento de embarazos no deseados y de contagios de ETS (enfermedades de transmisión sexual) en personas cada vez más jóvenes.
Estos estudios reflejan que los jóvenes no están teniendo un acceso correcto a la información, haciéndoles correr riesgos innecesarios.
Por eso, debemos aprovechar fechas como hoy, el Día Internacional de la Juventud, para hacerles llegar información importante para su desarrollo.
La sexualidad adolescente está envuelta en un halo de fantasía. Los jóvenes dan mucha importancia a su primera relación sexual, descuidando otros aspectos importantes para que sea segura y satisfactoria.
Por un lado, deben comprender que las relaciones han de ser consentidas. Ambas personas deben estar preparadas para ello y no se deben forzar situaciones desagradables.
Por otro lado, deben ser seguras. Usar métodos anticonceptivos de barrera es vital para prevenir enfermedades de transmisión sexual como el virus del papiloma humano, el SIDA, la gonorrea, herpes, etc. Además también previenen de embarazos no deseados.
Además, es interesante hacerles comprender que una vida sexual activa no significa cambiar de compañía continuamente. Aunque existen aplicaciones que motivan a buscar escarceos amorosos y diferentes parejas sexuales, tal vez no sean las más adecuadas para jóvenes inmaduros.
Finalmente, como mensaje fundamental, deben saber que la vida sexual comprende mucho más que el mero acto físico. Entran en juego las emociones y los sentimientos.
En la actualidad existen muchos métodos anticonceptivos eficaces. El más extendido sigue siendo el preservativo, que puede conseguirse fácilmente en farmacias y grandes superficies. Además, es el más recomendado para relaciones esporádicas.
Cuando la pareja es estable y no existen enfermedades que puedan transmitirse vía sexual, pueden plantearse otros métodos como la píldora, el DIU, el SIU, los parches e inyecciones hormonales, etc.
Aun así, existe un pequeño margen de fallo en los métodos anticonceptivos. Por eso, es importante que los jóvenes sepan cómo reaccionar ante posibles contratiempos surgidos durante las relaciones.
En el Día Internacional de la Juventud, desde Novasalud somos conscientes de que esta etapa es especialmente complicada para padres, profesores y los propios adolescentes.
Por eso, ponemos a su disposición nuestras herramientas especialmente diseñadas para una correcta salud escolar. Contacte con nosotros y le ayudaremos a abordar los temas que le preocupen.
29 febrero, 2020
27 febrero, 2020